Por Richard A. Gonzalez
(Publicado viernes 7 de abril)
Saludos a todos los que han estado pendiente a mi y a mi recuperación, mucho ha pasado desde la ultima semana, o apenas siento que así ha sido.
Tuve la oportunidad de ir a un juego de beisbol AA como un espectador, algo que no hacia hace mucho. Definitivamente me pongo más ansioso de fanático en el "dugout" que jugando, prefiero los fanáticos gritándome a mi. Durante el juego de nuestro equipo también fui invitado a ser parte de la transmisión en el juego de los Toritos vs Bravos, aunque me lo disfrute no pude ser parcial hacia el otro equipo, tengo muy presente mi instinto competidor.
Mientras más nos acercábamos a la fecha de la operación, más ansioso me sentía, ya quería que pasara el día y poder empezar con la rehabilitación. Varios días tuve que irme a hacer algo de ejercicios, como pudiera, para botar la ansiedad en especial el día antes. Ese día fue el mas intenso. Entre dejar todo listo en el trabajo y manejar como me sentía se me fue el día rapidísimo. También quiero reconocer que debe haber muchas personas en este y otros países no tienen la accesibilidad de ciertos servicios de salud necesarios para llevar una vida sana. Esos últimos días salieron a relucir unos costos increíbles por la cirugía que espero que el seguro de la federación me ayude a cubrir, pero si hubiera sido un ciudadano normal y corriente alomejor no hubiera podido hacerse la cirugía.
Finalmente el día de la cirugía llego, increíblemente ese día me sentía mucho mas tranquilo. Desde las 5:30am estuve en la sala de espera en ayuna, creo que esa fue la peor parte. Cuando finalmente me hicieron pasar, a eso de alrededor de las 7:15 me hicieron el bloqueo y me administraron sedante intravenoso. Se que me pasaron a eso de las 9am a sala de operaciones pero eso es lo ultimo que recuerdo, los técnicos alistándose y poniendo listo el equipo pero ni el médico entrar alcance a ver. Me levante a eso de las 11am ya operado, con vendaje en mi hombro y con mi padre al lado. Me cambiaron de ropa, me ayudaron hacia el carro donde le dije a mi papa que parara para comprar un Pancho Sandwich porque tenia mucha hambre. Las siguientes horas fueron cómodas, mucho sueno y poco dolor, todavía tenia el bloqueo en el hombro. La noche llego y la pude pasar bastante bien aunque tuve que dormir sentado. El segundo día fue un poco más difícil, ya quería empezar a rehabilitar, el no tener tanta independencia me molestaba algo al igual que el repentino sedentarismo. Me puse a buscar ejercicios que podía hacer, trabaje en la computadora ya estaba contando las horas para ver el doctor el lunes. Poco a poco me fui calmando, lo estoy tomando como una oportunidad de arreglar algunos sistemas que durante la vida rápida que llevo se me hace difícil arreglar. Si es un poco estresante no poder dormir cómodo o depender de mi esposa, que le doy un premio, para bañarme, pero estoy bien y mejorando. Ya hoy no tengo mucho dolor y me bañe solo, eso es un paso.
Aquí viene la próxima semana y estamos positivos que seguiremos adelantando.